Un cambio en el sentimiento general del mercado, impulsado por un aumento en la aversión al riesgo, como la percepción de un ciclo bajista inminente o una posible recesión económica, podría ser un buen fundamento para ir en corto. Indicadores como el Índice de Volatilidad (VIX) pueden anticipar caídas si muestran un incremento sostenido...